El color rojo de su coche fue mi primera impresión de esta joven diseñadora, sin duda un color muy en sintonía con su personalidad.
Allí estaba, montada en su vehículo particular después de saludarla como si la conociese de toda la vida. Lucía y yo por fin nos habíamos puesto cara después de unas cuantas conversaciones por las redes sociales. Nos presentamos y nos fuimos a tomar algo en un rincón bonito del Puerto de la Cruz, su ciudad en Tenerife. Música a tope de su lista de Spotify y ventanillas bajadas para combatir el calor de aquella tarde de verano.
Una terraza al aire libre y unos batidos fueron suficientes para pasarnos largas horas hablando de proyectos, moda, mundo influencers o incluso del calentamiento global, un asunto que como jóvenes nos preocupa bastante.
Estudio diseño de zapatos en London College of Fashion y, aunque es una Universidad de renombre yo siempre digo que eso es relativo porque lo que hace que la universidad tenga buen nombre es quien sale de ella. Quien termina sus estudios tiene las herramientas pero también el talento. Stella McCartney estudió en Saint Martins, pero podía haber estudiado en Marangoni. De hecho Marangoni es famosa porque allí estudió Domenico Dolce de Dolce&Gabanna. Polimoda es famosa porque estudió Edgardo Osorio, por ejemplo. Yo lo miré todo antes de elegir mi universidad. Mi grado en diseño de zapatos por ejemplo lo hizo Jimmy Choo y Sophia Webster.
¿Siempre has tenido claro que querías dedicarte al diseño de zapatos?
Tuve claro lo que estudiar el verano antes de comenzar la ESO. Un día estaba en playa la arena y cogí una revista de mi madre. De repente había un artículo sobre Edgardo Osorio, que había lanzado su marca Aquazzura. En ese momento me di cuenta de que siempre me habían gustado los zapatos pero nunca me había dado cuenta de que se podían hacer zapatos súper originales y para el día a día, como son los que este diseñador hace.
En muchas entrevistas te han preguntado sobre tus inicios, ¿cómo fue abrirte un blog y adentrarte en el mundo de la moda y el diseño?
Con el blog empecé en 2014, con 15 años recién cumplidos. Lo empecé porque siempre me ha gustado escribir y contar cosas. Soy la chica que más habla del grupo y la continua búsqueda de alguien a quien contar me llevó al medio. Me acuerdo de que quería hacerlo pero me daba vergüenza por lo que diría la gente.
Al principio era un blog privado y lo abrí al público cuando ya tenía algunas entradas escritas para que hubiese material suficiente para leer. Desde el principio fue un blog de temas variados. Siempre he dicho que las mujeres no somos solo moda así que yo al principio lo enfoqué a todo menos a este ámbito.
Tenía distintas secciones y era muy divertido crearlas porque las hacía con mi madre y le poníamos nombres como: “Bueno, bonito y barato”, para la sección de rebajas; “Ay que rico”, “¡Qué pintón!”, para la sección de la comida, etc. Iba con mi cámara buscando cafeterías por el Puerto. Me centraba especialmente en recetas y lugares que poder visitar dentro y fuera de las islas. Fue después cuando empecé con las fotos de outfits para eventos especiales.
Ahora el blog ya no existe porque lo he convertido en mi porfolio. Creo que he evolucionado y ya no tengo necesidad de programar publicaciones. He guardado, por supuesto, todas las entradas para mí, para tenerlas como un buen recuerdo.
¿No te hubiese gustado que eso quedara ahí como parte de tu pasado?
Sí, pero no. El blog me dio muchas cosas buenas. Si no hubiesen visto la iniciativa de esa niña de 15 años a la que le gustaba escribir quizá no me hubiesen cogido para la beca de estudios en Inglaterra. Jugó roles importantes, tuve muchas oportunidades gracias al blog y conocí a mucha gente estupenda. Sin embargo, ahora con veinte años me he dado cuenta de que nunca me ha gustado contar cosas de mi vida personal.
“Soy canaria, no influencer“
Lucía Débora Violán
Me di cuenta de que la gente empezaba a preguntarme cosas sobre mi vida privada. Entré en la categoría de “influencer” y a mí eso no me gustaba. Me gusta recomendar cosas o lugares a la gente pero no exponer mi vida. Eso no me hace ilusión, yo soy diseñadora. De hecho, cuando me dicen “tú eres la influencer” yo les niego diciendo que yo soy canaria, no influencer.
Lo que quiero hacer a partir de ahora es publicar cosas en mis redes sociales relacionadas con mi trabajo y no con mi vida privada. Puse fin al consumismo de ropa destinada casi en exclusiva para mi contenido en redes. Creo que se ha deshumanizado el trabajo como creadores y creadoras de contenido, teniendo que ajustarse el propio profesional a las exigencias de los usuarios.
“Lusía con “s”, ¿por qué?
Mi madre y yo estuvimos bastante tiempo pensando el nombre del blog. “Luces” viene de pensar que la moda la luces, la muestras, además de que mi nombre viene de la palabra luz. Lucía, por su parte, empezó con z (“Luzía”) para que se viera reflejado lo de luz, pero luego me di cuenta que siendo canaria no tiene ningún sentido, además de que en el logo tampoco quedaba demasiado estético.
¿Tienes relación con tus seguidores y seguidoras?
Reconozco a algunas seguidoras. Por ejemplo, tengo una seguidora que se llama Marie y que a las 23:23 revisaba las redes sociales, y todo lo bueno siempre le pasaba el 23. Entonces, cada vez que yo veo un 23 me acuerdo de ella y se lo mando.
También tengo una seguidora que me pasa libros. Por algún motivo que desconozco, tiene todos los libros del mundo. Yo le pregunto y ella siempre tiene el que busco y me lo manda al ebook.
Por otro lado, no tengo haters, lo cual me alegro muchísimo, aunque sí que la gente me mandan críticas negativas por redes, sin vergüenza ninguna.
Si digo “Luces Lusía” probablemente la gente te relacione con tus plantillas, ¿tienes pensado seguir con este proyecto?
Yo tuve suerte con las plantillas. Me gustaba saber sobre mis seguidores y de ahí y el aburrimiento las creé y empezaron a llegar a muchas personas de la noche a la mañana. Llegaron a compartirlas incluso Anna Padilla y Blas Cantó. Pero hubo algo de “factor suerte” a partir de un trabajo duro gracias a mis estudios y proyectos de diseño gráfico.
Pero las plantillas formaron parte de una etapa concreta de mi vida y ya no quiero seguir haciendo más. Además, he tenido algunos problemas porque yo fui quien las creó y las tengo registradas, pero incluso grandes marcas llegaron a copiar el diseño de mis plantillas. Tenía que hablar continuamente con mi abogado aunque yo no tenía ninguna necesidad de recibir compensación económica.
¿En qué te inspiras para diseñar tus zapatos?
Me gustan los zapatos cómodos y funcionales aunque lo que más estudio en el diseño de los míos propio es el tacón. Me gusta jugar con la forma de los tacones e inspirarme en formas arquitectónicas y geométricas. Eso sí, siempre utilizo colores vivos.
¿Tienes algún zapato caro/de lujo?
No. Durante mis primeros años estudiando diseño tuve una obsesión por comprar zapatos. Tenía más zapatos que tiempo para ponérmelos. Sin embargo, no tengo ningún zapato caro porque, aunque me gusten mucho, no son una prioridad. Además, una vez dije que si algún día tengo unos caros sería porque los compraría yo con mi propio dinero o porque el diseñador me lo regalase.
¿Crees que la insularidad te ha limitado a la hora de buscar salidas profesionales?
Creo que en parte sí que me ha afectado, sobre todo al principio cuando la gente me decía que empezaba a seguirme. Yo sentía que me lo decían en tono irónico, como para reírse de mí.
Hay gente que sale fuera y se siente acomplejada. Yo nunca renegaré de ser canaria, a pesar de que mi vida aquí es diferente a la que llevo en Londres.
A nivel profesional ¿En qué momento te encuentras ahora mismo?
“¿Por qué las redes sociales están maquinando tu vida?” Es un libro que me ha hecho reflexionar sobre el consumismo, especialmente en moda.
Estoy tranquila de haber dejado Instagram por un tiempo. Este verano estuve en Costa Rica y no tengo fotos, no quería tener esa necesidad de estar en redes para justificar que había estado allí. El año anterior me fui a México y llevé un montón de ropa para sacarme fotos, pero para este viaje he llevado lo justo. No hay constancia de que yo haya estado allí y ha sido uno de los mejores viajes que he hecho.
Ahora estoy un poco en stand-by, no he abandonado mi página pero tengo otro proyecto entre manos al que dedico más tiempo. Quería sacar Luces Lusía Shop el año pasado, con diseños de papelería en los que incluía fundas de móvil, pero al final no fue viable. Es por eso que estoy ahora con un proyecto también de mis diseños que enseñaré más adelante, pero esta vez sin fundas para móviles.
SI LUCÍA FUERA UN ZAPATO SERÍA…
Escucha lo que Lucía ha contestado a su plantilla “¿Qué preferirías…? Random edition” y contesta tú también utilizando la plantilla a continuación.
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