[CINE]
Irene Azuaga González
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Solo “un poco de respeto” es lo que exigía Aretha Franklin mientras cantaba para no dejarse pisar por nada, ni por nadie. La reina del Soul falleció en 2018 dejando un legado único y extraordinario al que, desde el cine, se le quiso rendir tributo. El resultado de este llegó a España el 24 de septiembre de este mismo año bajo el nombre de “Respect”, una biopic protagonizada por la cantante Jennifer Hudson y dirigida por Liesl Tommy. El reparto incluye rostros conocidos como Tate Donovan, Audra McDonald y Forest Whitaker.
Quien no conozca el recorrido de esta cantante nacida en Tennessee, pero criada en Detroit, puede ver en la película cómo la artista se inició en el Gospel. Un estilo que llevó siempre consigo y fue la base para componer sus grandes éxitos.
El hilo narrativo de la película es lineal, pero lleno de inspiración. Recorre desde su niñez, −donde Aretha sobrevive a una experiencia traumática− hasta su adultez. En la cinta se ve cómo sus primeros discos con Columbia Records no tienen mucha acogida y carecen de un estilo propio, pero tras varios intentos, y un cambio de discográfica, a finales de los años 60 Franklin se hace un hueco en la industria musical. Este hecho se convierte en la clave para el éxito y la continuación de una carrera que la llevaría muy lejos.
A pesar de su reconocimiento como artista, su vida nunca ha estado repleta de glamour, pues su padre, su mánager y su primer marido fueron unos elementos decisivos en su trayectoria, tanto por su apoyo incondicional, como por el hecho de suponer un obstáculo en un momento dado de su vida. Sin embargo, su personalidad arrolladora hizo que nada se interpusiera entre ella y la música. Con ayuda de su fe y sus ganas de triunfar, sobrevivió a desafortunadas experiencias que marcaron su vida.
Fue víctima de un abuso sexual, que la convirtió en madre con tan solo 12 años. Además, sufrió las constantes presiones de su padre y el maltrato físico y psicológico de su primera pareja sentimental. Desde entonces, Franklin ha sido una total defensora de los derechos de la mujer en la industria musical y ha condenado el machismo y el racismo.
A lo largo de su carrera ganó 18 Grammys y vendió millones de discos gracias a temas como Say a Little Prayer o Respect, que da nombre a su película biográfica. Esta misma canción la entona Jennifer Hudson, ganadora del premio Oscar y Grammy y elegida por la propia Franklin para interpretarla en la gran pantalla. “Las palabras no pueden expresar lo agradecida que estoy de ser elegida por la propia reina y vivir otro sueño. Fue un honor honrar la memoria de la única reina del soul”, escribió Hudson en su cuenta de Instagram.
Respect cumple con los requisitos de una biopic, en la que se muestra que en la vida de Aretha Franklin no era oro todo lo que relucía. No obstante, la película permite ver a una Aretha valiente y humana, que a pesar de ser una de las grandes divas de la canción, también luchó por sobrevivir y denunciar sin tapujos la transgresión de los derechos civiles y fundamentales.
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