Colaboración con Lucía Ruíz-Capillas Sánchez, comunicadora especializada en moda
¿Qué es la culpa? La culpa es una emoción negativa y adaptativa que sentimos los seres humanos tras haber hecho algo que traspasa las normas éticas, o simplemente tras pensar que lo hemos hecho. ¿Sabías que las mujeres experimentamos el sentimiento de culpa con una intensidad y frecuencia mucho mayor a la de los hombres?
La herencia de una cultura patriarcal reforzada por las religiones tiene muchísimo que ver con este hecho. Desde pequeñas nos cuentan que todos los problemas del ser humano son responsabilidad de Eva, la primera mujer que habitó la tierra. Que, si no fuera por ella, seguiríamos viviendo sin preocupaciones en un paraíso eterno. Que Eva terminó con todo y condenó a la humanidad a causa de su rebeldía, egoísmo y desobediencia al morder la famosa fruta prohibida del Jardín del Edén.
Pero… ¿qué pasaría si interpretáramos todo esto desde otra perspectiva? ¿Y si resultara que Eva no fue una mujer pecadora y tentada por una serpiente, sino la primera mujer libre que tomó sus propias decisiones y nos enseñó lo que de verdad es el placer? Bajo este paradigma surgió Eva al desnudo, la última apuesta de Desigual by Miranda Makaroff.
“Sexo, naturaleza, creatividad, y amor”, cuatro palabras con las que Desigual define su propia colección en colaboración con Miranda. Sus prints nos cuentan historias de mujeres autónomas que, en comunión con la naturaleza, disfrutan del sexo afrodisiaco y conviven en libertad. El concepto de la naturaleza está muy presente en la colección, lo que también se traduce en una gran apuesta por la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente por parte de Desigual. Todas las prendas de esta cápsula son de algodón orgánico y tejido EcoVero, suponiendo así un menor impacto para el planeta.
Prints de Miranda Makaroff para la colección, desigual.com
Tank tops, pantalones de corte acampanado y largo pirata, tops de nido de abeja, punto de canalé, camisetas orgánicas, bordados artísticos de hilo, camisas con patrón oversize o cazadoras ilustradas nos invitan a reflexionar sobre la libertad, el placer, el medioambiente, la mujer, el erotismo, las fantasías sexuales y las creencias populares.
No es la primera vez que la marca y la artista colaboran. Ambas tienen mucho en común; empezando porque las dos nacieron en Barcelona en 1984, pasando por el particular uso que tienen del color y la pasión por el arte y terminando por su filosofía y manera de ver la vida: divertida, desenfadada y en ocasiones polémica.
Miranda Makaroff vistiendo sus propias creaciones, desigual.com
El pasado diciembre, Miranda Makaroff llevó su arte de la mano de Desigual a Art Basel Miami Beach con su exposición Sexhibition, que representa el origen del mundo (en consonancia con Gustave Coubert). Makaroff ya había expuesto su primera Sexhibition en Madrid, una instalación en forma de vagina a la que había que entrar para ver el resto de obras. A través de la metáfora, Miranda nos invita a todos a entrar por la puerta de la vida – de forma literal – para acceder al lugar en el que nos sentimos arropados y protegidos, al lugar en el que todo comienza y del que todos procedemos. La confianza de la artista en su propio proyecto sumado al éxito y repercusión de la Sexhibition de Madrid llevaron el concepto un paso más allá, ampliando horizontes para exponer en EEUU.
"Miami loves different" & "ɒvƎ by Miranda Makaroff". Desigual
Por su parte, Desigual, fiel a la estrategia que adoptó hace un tiempo basada en “ir más allá de las fashion weeks y vincular sus productos a momentos artísticos o culturales y no tanto a la moda per se” se enamoró (una vez más) de la creatividad de la artista y la impulsó a cruzar el charco a propósito de su participación en el festival de fin de año de arte en Miami Art Basel. La marca aterrizó en Miami para presentar su “única colección en la que no hay temporadas” a través de Miami Loves Different, en el que se mostraron diferentes prendas entre las que se encuentran las que firma Makaroff.
Bajo la dirección creativa de mi admirada Carlota Guerrero, Desigual llevó a cabo una performance llamada El Beso (probablemente haciendo un guiño a Gustav Klimt) en la que varias personas desfilaban bailando y vistiendo las prendas de la marca para terminar desvistiéndose, besándose y acariciándose simultáneamente al ritmo de: Love different.
En concordancia con el ambiente creado por Guerrero, Miranda presentó su remasterizada vagina gigante para mostrar ɒvƎ, la historia de la primera mujer en la tierra contada desde otra perspectiva: “Siempre se nos ha dicho que Eva fue la culpable, pero deberíamos estar agradecidos porque ella fue la gran descubridora del placer”.
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